sábado, 14 de abril de 2012



De vez en cuando se acordaba.
Ojos redondos clavados en horizontal, apretado puño alrededor de un almohadón, dientes en duelo, músculos encogidos.



Lo recordaba cuando lo oía latir en el fondo de una caja bajo libretas de garabatos, trompeta desafinada y zapatos de tacón desgastado.
Se acordaba, de vez en cuando.




No hay comentarios:

Publicar un comentario